Otras alopecias

La alopecia difusa es un cuadro caracterizado por una pérdida de cabello que no se concentra es una zona concreta de la cabeza. Responde a diferentes motivos, algunos de los más frecuentes son infecciones, déficit de vitaminas en la dieta, tratamientos farmacológicos agresivos o enfermedades de la glándula tiroides. Todos estos motivos afectan al normal desarrollo del folículo piloso pero de modo reversible, de forma que cuando se soluciona el problema el pelo vuelve a crecer de forma normal. Por ello, es importante diagnosticar el origen de la alopecia y tratarla adecuadamente con el fin de revertir el proceso.

Se trata de una patología que produce zonas de calvicie con forma redondeada, cuyo origen proviene de un fallo en el sistema inmunológico que provoca que nuestro sistema defensivo ataque a los folículos pilosos. Se relaciona frecuentemente con situaciones de estrés. Hasta un 40% de los casos tienen crisis de ansiedad previas. Al igual que ocurre en la difusa si se identifica y soluciona la situación de estrés se puede revertir la alopecia.
Hablamos de alopecia areata total cuando afecta a todo el cuero cabelludo y de alopecia areata universal cuando afecta a todo el cuerpo.

Se produce por tracción de los cabellos, en muchos casos, fruto de un tic inconsciente que nos hace coger y estirar los cabellos. Se puede producir tanto en niños como en adultos y también se denomina tricotilomanía.
En ocasiones, la alopecia traumática se da por una tracción excesiva de los peinados como moños o colas que estiran de forma continuada los cabellos dando lugar a roturas y arrancamientos.

Se trata de un tipo de alopecia provocado por una afectación de la dermis que impide el crecimiento de los folículos pilosos. Existen múltiples causas pero las podemos clasificar en hereditarias, infecciosas, neoplásicas o por dermatosis. También, es la alopecia que se genera en una zona en la que se ha producido una cicatriz o herida profunda en la piel, a veces fruto de una intervención quirúrgica o de una herida. Este tipo de alopecia suele ser permanente y no responde a los tratamientos habituales.

Es una alopecia muy poco  frecuente hasta el punto de que está considerada una enfermedad rara. Afecta, sobre todo, a mujeres y suele debutar en la etapa de la menopausia pero con un patrón diferente a la alopecia androgenética. La pérdida de cabello se inicia en la zona frontal  y se suele acompañar de pérdida de pelo en otras zonas del cuerpo como cejas y axilas.